Firmo en el número de julio de la revista iRehabitae un artículo sobre la necesidad de abordar las reformas y rehabilitaciones desde una perspectiva que va más allá de los criterios sostenibles y de eficiencia energética impulsados por los fondos europeos Next Generation.
Se trata de aplicar los criterios de la arquitectura saludable y la neuroarquitectura para convertir los espacios en los que vivimos y trabajamos y en los que pasamos el 90% de nuestras vidas en espacios saludables y cuidadores.
Se trata de aprovechar esas obras de reforma para convertir nuestras viviendas, oficinas, colegios, restaurantes…en espacios sostenibles y saludables, que tengan como objetivo el bienestar físico, mental y social de las personas.