El pasado 11 de octubre estuvimos charlando sobre arquitectura y personas mayores en el programa El sol sale por el oeste, de Canal Extremadura.
Durante la conversación, expliqué la necesidad de aplicar los criterios de arquitectura saludable y neuroarquitectura en los edificios públicos y especialmente en aquellos destinados a las personas más vulnerables.
De esta forma, conseguiremos mejorar la calidad y esperanza de vida de los ciudadanos, especialmente ancianos, con problemas de demencia o personas neuroatípicas. Ahora, es fácil desorientarse y perderse, por ejemplo, en residencias de ancianos, diseñadas como auténticos laberintos llenos de largos pasillos con numerosas puertas idénticas.
Comparto la entrevista completa.